Implantes dentales en Madrid
¿Qué es un Implante dental?
Un implante dental es una pieza metálica parecida a un tornillo que se introduce en el hueso y cuyo objetivo es soportar una prótesis para restaurar los tramos desdentados y devolver a la cavidad bucal el equilibrio perdido recuperando su funcionalidad y estética.
La base científica de los implantes dentales es la osteointegración que consiste en el anclaje directo al hueso de un cuerpo implantado.
Para que un cuerpo extraño implantado en el hueso quede perfectamente osteointegrado es imprescindible que esté fabricado con un material inerte. Por este motivo, los implantes dentales están hechos de titanio comercialmente puro (Ti 99.75%).
¿Qué es una prótesis sobre implantes?
El segundo elemento, no menos importante, es la prótesis que se fija al implante.
Esta prótesis puede ser:
- Unitaria: para restaurar la ausencia de un solo diente y que se denomina corona sobre implante.
- Múltiple: para la rehabilitación en pacientes desdentados totales o parciales. En este caso lo habitual es colocar varios implantes sobre los que se fija un puente de varias piezas o una dentadura.
La conexión entre el implante integrado en el hueso del paciente y la prótesis se realiza a través de los aditamentos protésicos, que son piezas generalmente atornilladas al implante a las que se fijan las coronas, puentes o dentaduras.
¿En qué consiste un implante?
El tratamiento para realización de un implante y de la prótesis implantosoportada requiere las siguientes fases cuyo fin es éxito del implante:
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Entre el proceso quirúrgico de colocación del implante y la colocación de la prótesis hay un periodo de curación ósea (osteointegración) que dura normalmente 4 meses en el maxilar superior y 6 meses en el maxilar inferior.
Durante este periodo el implantes no debe soportar presiones excesivas para garantizar su éxito. Por este motivo, una vez cicatrizada la mucosa (encía), a los 15 días de la intervención quirúrgica, se puede ajustar una prótesis provisional que impida que las presiones que se producen durante la masticación interfieran en el proceso de curación del hueso.
La osteointegración es el proceso que permite que el implante quede fijado al hueso y se produce por la regeneración ósea alrededor del implante de manera que éste quede perfectamente integrado en la mandíbula.
Para mejorar la osteointegración del implante, la superficie de contacto con el hueso suele estar tratada para hacerla rugosa y permitir que las nuevas células óseas envuelvan el implante asimismo suelen añadirse sustancias como la hidroxiapatita de calcio para favorecer la regeneración celular del hueso.
Resolvemos tus dudas
Si has perdido una pieza dental lo más recomendable es reponerla cuanto antes y nuestra recomndación es reponerla con un implante con corona, por qué?:
- Los implantes son cómodos, funcionales y muy estéticos.
- Permiten conservar el hueso en comparación con otras opciones como son los puentes o las prótesis removibles porque en estos casos se sigue produciendo pérdida de hueso.
¿Por qué elegir un implante dental?
- Al ser fijos no hay que quitarlos para limpiarlos, como ocurre con las dentaduras postizas y no se mueven ni producen roces ni heridas en las encías.
- Cuando se coloca un implante, no hay que tocar el resto de los dientes, que es lo que hacemos cuando se ponen puentes
- La estética de las coronas sobre implantes es muy buena y queda muy bien integrado con el resto de los dientes.
- Para colocar un implante se realiza una cirugía sencilla y se puede hacer vida normal al día siguiente.
- Cuando colocamos un implante conservamos el hueso ya que hay tendencia a que éste disminuya debido a la pérdida de la raíz dental, produciéndose un cambio en la fisonomía en la cara del paciente.
- Su higiene es muy buena, igual que si tuviésemos nuestros propios dientes: es suficiente con un cepillado tres veces al día, uso del irrigador y enjuague bucal.
- El implante dental es un tratamiento mucho más duradero que otros tratamientos.
Entre el proceso quirúrgico de colocación del implante y la colocación de la prótesis hay un periodo de curación ósea (osteointegración) que dura normalmente 4 meses en el maxilar superior y 6 meses en el maxilar inferior.
Durante este periodo el implantes no debe soportar presiones excesivas para garantizar su éxito. Por este motivo, una vez cicatrizada la mucosa (encía), a los 15 días de la intervención quirúrgica, se puede ajustar una prótesis provisional que impida que las presiones que se producen durante la masticación interfieran en el proceso de curación del hueso.
La osteointegración es el proceso que permite que el implante quede fijado al hueso y se produce por la regeneración ósea alrededor del implante de manera que éste quede perfectamente integrado en la mandíbula.
Para mejorar la osteointegración del implante, la superficie de contacto con el hueso suele estar tratada para hacerla rugosa y permitir que las nuevas células óseas envuelvan el implante asimismo suelen añadirse sustancias como la hidroxiapatita de calcio para favorecer la regeneración celular del hueso.
Tras una cirugía para la colocación de implantes se pueden producir algunas complicaciones como pueden ser: hemorragia, sobre todo en pacientes con tratamiento anticoagulante; edema, hematoma y dolor como reacción ante la intervención quirúrgica. En ambos casos son complicaciones que desaparecen al poco tiempo con aplicación de frío, analgésicos y antiinflamatorios.
A veces, se puede producir infección que se manifiesta en dolor, edema y exudado purulento en la zona donde se han colocado los implantes. Para evitarlo, se adoptan medidas profilácticas como la prescripción de antibióticos.
En alguna ocasión y de forma transitoria, se han dado casos de trastorno sensitivo por compresión del nervio dentario.
Con frecuencia aún menor pueden producirse comunicaciones con los senos o con las fosas nasales y lesionar raíces de dientes adyacentes lo que requerirán tratamiento posterior por el especialista.
La colocación de un implante dental es un procedimiento quirúrgico menor que se realiza de manera rápida y sencilla con anestesia local y en consecuencia, no se siente dolor.
Después de la cirugía se prescriben antibióticos y analgésicos para evitar infecciones y posibles molestias que no llegan a ser grandes.
El cuidado de los implantes no se diferencia del cuidado del resto de los dientes:
- Higiene continua con limpieza al menos tres veces al día y uso del irrigador.
- Revisiones periódicas al menos 1 ó 2 veces al año.
- No utilizar los dientes como herramienta para abrir o arrancar objetos.
- En caso de notar movimiento o aflojamiento de la corona o prótesis, acudir inmediatamente al dentista para que se realice el reajuste o sustitución de los tornillos de fijación.